lunes, marzo 10, 2014

11 DE MARZO: SIEMPRE HABRÁ UN ANDÉN


Joan Miró

Sobre el riel de la desazón seguimos y seguiremos 
soñando andenes que conduzcan 
a la estación de la esperanza hasta que los
campanarios logren deletrear su andante
en el corazón compartido del hombre

11 de marzo del 2014




Siempre el dolor y el horror
tejen hilos que juntan los espacios
en un solo paisaje
que se oscurece por igual
mientras la vertiente de la lágrima
no se haga río otra vez
y los rostros desdibujados
por el reloj roto del hombre
no recobren su dimensión
de asombro y su dintel azul
de encantamientos

Siempre hay un tren
para que la pena se haga camino
entre los gestos que cabalgan
sobre el riel de la desazón
y siempre habrá un andén
para que en él la primavera
comience a deletrear su canción
de esperanza

Por eso en estas horas
de palabras recogidas
y estallidos de silencio
el desasosiego se prende
de las imágenes quebradas
para retener en los diminutos
espejos de la vida
la sonoridad de la risa
que tendrá que ser
y las guarda en el recinto
donde los campanarios
escriben su adagio
en el corazón de los cielos

11/03/04

mery sananes

1 comentario:

Unknown dijo...

Hermoso poema para dar nombre al dolor. Y el hecho de que lo hayas escrito me deja el calor de la solidaridad, porque aquello fue extremadamente duro...