miércoles, julio 26, 2006

EMBUSTERIAS DE CHIPILI

Pablo Picasso
En el corredor de tus pupilas
racimos de versos
se desgajan de las arbolas
sembrando de pastos el cielo
y una estampida nocturna
de palabras dibuja pájaros
con sabor a estrellas


MS / Cartas al Chipili / Inédito
Leopold Mozart
Sinfonía de los juguetes / 2do movimiento

3 comentarios:

  1. Salvar las preguntas de los niños para que el hombre no pierda jamás su asombro. Nombrar la libertad. Inventar la vida en lo alto de los árboles para salvar los pájaros de la tierra. Encender el fuego. Morir cantando. Vencer la muerte. Sacudir asombros. Esparcir los altos sueños, la fuerza de los ríos, el color de los pájaros, las canciones, las hierbas de las tardes. Devolverle vida a la tierra, color al arco iris, alegría bullanguera a la lluvia. Andar rompiendo cercas y levantar en su lugar enredaderas de jazmines que convoquen el aliento del hombre hacia su destino cósmico y vegetal. Dar con nuevos alumbrajes. Participar en la fiesta de la vida. Preparar un manjar que alcance para todos. Ver morir a la gacela bajo los tamarindos. Vaticinar, profetizar, bucear en las tinieblas de los tiempos. Clamar contra la impiedad, la opresión, la codicia, la crueldad. Arrullar, despertar, mecer, golpear, gritar, empujar. Medir, valorar. Saber bien dónde hay barro, en qué lugar hay sangre, dónde queda la razón y dónde la justicia o la injusticia. Invitar al sol. Encender la luz. Profetizar contra los explotadores, los embaucadores. Interpretar los remolinos. Expresar al pueblo. Avivar el fuego. Sumar la voz al coro. Fundir los versos en acero. Amarrar el viento viejo. Construir la nueva levadura, el nuevo pan: la paz, el lauro, la memoria. Con la primavera, caminar al mercado entre panaderías y palomas. Dar socorro a nuestros sueños, más allá de cruces, lenguas, misterios, milagros o lejuras.

    Pablo Mora (Sombra Antigua).

    ResponderBorrar
  2. de embustería en embustería
    la noche va cubriendo
    lejura estrella albada y estampida

    ResponderBorrar
  3. salmo al ristre

    Errante quejumbroso solitario entre la noche
    zigzagueando sombra vendaval
    el hombre prosigue con su sombra a cuestas
    temperándola con su insomnio
    para muchos un asombro
    solo los rebeldes se quedarán al seco
    tras la muda paloma de los lejanos terebintos

    p. m.

    ResponderBorrar