Los que no pudieron
hacer camino hasta las palabras
desasistidos como estaban de vida
que no de muerte
hablo por ellos
los que les estalló su alegría
en movimiento y en danza que
se esparció en el viento
digo por ellos
a los que no les salió el grito
porque antes se atravesó la bala
enemiga certera en la medida
de sus sueños
yo grito por ellos
a los que se les ahogó el gesto
en el trayecto amoroso hasta la vida
yo canto por ellos
los que fueron olvidados
hasta por las historias más
sencillas
yo doy testimonio por ellos
y los hago venir
a los que amalgamaron
en barro y arcilla
su alto sentido de la vida
yo amaso por ellos la palabra
hasta hacer de la poesía
un cántaro inmenso una vasija
honda donde quepa lo maravilloso
a los que cultivaron los campos
que dieron pan para todos
yo siembro por ellos
hasta sacarle raíz a las palabras
y un follaje de ramas que anticipe
nuevos frutos
a los que navegan solitarios
en las noches atrapando en sus
redes el silencio
yo hago de la palabra bajel de
velas extendidas que invite
a recorridos sin orillas
a los que multiplicaron su llanto
en los túneles más profundos en las
máquinas infernales en las calles
desoladas de los otros
yo lloro por ellos
hasta dejar húmeda y salobre
la palabra
a los que no tuvieron tiempo
de reclamar su parte de infinito
su pedazo de asombro
yo vivo por ellos por la luz
que adivinaron a lo lejos
por el porvenir que le inventaron
a la mañana del hombre
yo edifico por ellos
por los que fueron encerrados
amurallados y cercados
yo blasfemo por ellos
y hago de la palabra oficio
de dinamitero
por los que conocieron el amor
y lo ofrendaron abierto extendido
silenciosa y reverentemente
yo amo por ellos
amo hasta los huesos hasta
lo más hondo de los pozos
hasta el fulgor más distante
del lucero
hasta donde el mar se viste
de horizonte e infinito
explayado de noche y de luna
y si esto no lo puedo hacer
si mi palabra se queda recostada
de los muros adherida a los papeles
inmóvil en las letras
echad entonces la poesía
de la casa del hombre
encended las lámparas
y dadme oficio de marinero
para ir a morir a los azules
lejanos
texto y foto
mery sananes / 1982
publicado en embusterías
en julio del 2009 y
el 17 de marzo del 2015
Conmovedor y bellísimo poema!
ResponderBorrarTan vigente y necesario!
Gracias Mery querida.
Gracias a ti, siempre, mi querida Silvia. que acompañas tan dulcemente cada una de mis letras, haciéndome sentir que valen la pena. El abrazo queda contigo desde hace mucho.
ResponderBorrarMery tus poemas plenos de Sentido, no valen la pena,
ResponderBorrarvalen la Vida!!! Gracias Poeta.
Con tanta vigencia en tiempos de desorden mundial
ResponderBorrarPoeta Mery Sananes su poema hermoso canto a la vida representa quienes dejaron la voz en el camino y los que llegaron sin poder expresarse en la escuela del olvido tienen ellos en usted el arte de hacer valer el silencio de las conciencias.
ResponderBorrarGracias Rafael, tu lectura reconforta, tus palabras estimulan. Tu presencia en mis espacios es eimpre un aporte.
ResponderBorrarTotalmente de acuerdo querida Mery
ResponderBorrarMery Sananes
ResponderBorrarComo les gusta a mis escritos recibir esa arquera. Gracias, Miguel.
Qué bueno, Mery, leer poemas que mantienen su vigencia, aunque duelan.
ResponderBorrarMe he metido en tus versos y me han acercado, de nuevo, aquel verso de Otero: Me queda la palabra.
Y a un poema de Alberti, también marinero, que te dejo. Decía Alberti:
Canto, río, con tus aguas
Canto, río, con tus aguas:
De piedra, los que no lloran.
De piedra, los que no lloran.
De piedra, los que no lloran.
Yo nunca seré de piedra.
Lloraré cuando haga falta.
Lloraré cuando haga falta.
Lloraré cuando haga falta.
Canto, río, con tus aguas:
De piedra, los que no gritan.
De piedra, los que no ríen.
De piedra, los que no cantan.
Yo nunca seré de piedra.
Gritaré cuando haga falta.
Reiré cuando haga falta.
Cantaré cuando haga falta.
Canto, río, con tus aguas:
Espada, como tú, río.
Como tú también, espada.
También, como tú, yo, espada.
Espada, como tú, río,
blandiendo al son de tus aguas:
De piedra, los que no lloran.
De piedra, los que no gritan.
De piedra, los que no ríen.
De piedra, los que no cantan.
Rafael Alberti.
Ay mi querido Juan, qué hermoso poema de Alberti te has traído. Qué inmensa la palaba de Blas de Otero.. Y qué gratificante es tu palabra cada día, . Gracias desde el alma. Abrazos extendidos.
ResponderBorrarpor los que conocieron el amor
ResponderBorrary lo ofrendaron abierto extendido
silenciosa y reverentemente
yo amo por ellos
amo hasta los huesos hasta
lo más hondo de los pozos
hasta el fulgor más distante
del lucero
hasta donde el mar se viste
de horizonte e infinito
explayado de noche y de luna
y si esto no lo puedo hacer
si mi palabra se queda recostada
de los muros adherida a los papeles
inmóvil en las letras
echad entonces la poesía
de la casa del hombre
encended las lámparas
y dadme oficio de marinero
para ir a morir a los azules
lejanos
Mery Sananes
Gracias Luis Miguel y muchos abrazos. Ay que los caminos recorridos y por recorrer siempre nos juntan. Y lo celebro.
ResponderBorrarNo seras poetisa pero cada estrofa refleja vivencia cierta y veras
ResponderBorrarYo por mi parte te doy Mis gracias por no olvidar al.
Labrego,al.que trsbajo la arcilla ybsaci una vadija llenas de marabillas.
Al que salio y no recreso
Por que lo atrveso una ,22,
Una 9mlts una 16 o cualquier otra todos estan presentes en nuestras mentes y cirazones que Dios los bendiga un abrazote
Gracias por tus palabras Yraima. Eso es exactamente lo que procuramos siempre hacer.
ResponderBorrarHe quedado enamorada de este hermosísimo poema, Mery! Es el más bello poema tuyo que he tenido oportunidad de leer. Te aplaudo y felicito, Mery de mi corazón... Y te quiero!
ResponderBorrarCómo no quererte Ulina. Tus palabras siempre dejan un eco muy especial en mi. Y te las agradezco mucho.
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ResponderBorrarSi me lo permites voy a compartir este poema, que no solamente es precioso, sino otras cosas más que ya han dicho otros y que siempre será "especial". Muchas gracias por este regalo.
Ojalá sea cierto que navegas con el pescador; qué siembras con el campesino.
ResponderBorrarEstaba viendo a Juan Villoro en una conferencia sobre Jack el fatalista... Dijo algo así "cada bala tiene una etiqueta"... Cada texto tuyo lleva su dirección... Gracias por ese maravilloso poema
ResponderBorrarMaravillosa poeta!...
ResponderBorrarMuchas gracias por ofrecernos tanta belleza!.
Un abrazo desde esta calurosa Murcia!...
Gracias a ti por comparir y acompañar!
ResponderBorrarTu palabra es tierra nutricia de belleza y de vida, Mery.
ResponderBorrarEn estos versos hay un aliento épico y otro lírico, un latido trepidante y un escalofrío como un relámpago.
Qué alegría, mi querido Óscar, que en medio de tus labores y avatares, te acerques a dejarme palabras tan especiales. Viniendo de quien, como tú, está forjado de una sensibilidad capaz de trastocar lo sencillo en un estruendo de flor, cobran un mágico sentido. Como el del abrazo. Como el de encontrarse en campos comunes y resguardarlos como se cuida al árbol, se riega la hierba, se asoma uno al poniente. Gracias aromadas con los últimos rayos de sol, invitando a la luna a la fiesta de su noche. Abrazos de mar.
ResponderBorrarGran poema nada quedó sin decir en estes sublimes letras que vuelan ante mis ojos y corazón por la emoción que a pesar de! tiempo adquirió en este hoy más verdad y deseos de libertad y justicia escritora Mery Sananes un regalo has escrito para mi alma comparto amiga
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