La lejanía es un vuelo de
azahares que prendidos de la
noche ascienden en tropel
hacia los adioses que nunca
se dijeron
La lejanía es de los atardeceres
que aún no desmigajaron sus sepias
en racimos de lilas extraviadas sobre
el sueño de un tiempo enamorado
La lejanía es un invento de la
memoria que se escapa por los
murmullos del agua hasta alcanzar
el río azul que la lleve a las
embarcaciones de los deseos
La lejanía es un canto que se
derrama sobre las arboledas
de la piel en ritual de colibríes
haciendo nido en el paladar
de una flor
La lejanía es una partitura
de guitarra aleteando melancolías
sobre la brasa de un nocturno y
el recinto de una lágrima que
olvido sus cerraduras en el
calendario de las horas que
nunca transcurrieron
La lejanía en fin no es sino
la certeza de una cercanía hecha
de limón y violeta inscrita para
siempre en el dedal de la alegría
texto y fotos
mery sananes
texto y fotos
mery sananes
Vengo leyéndote hace mucho tiempo y queria saludarte y agradecerte por llenar mis odres de tus letra en mis tiempos de sequía
ResponderBorrarUn saludo fraterno desde Medellín, Colombia
El poema es hermoso... y con una confección impecable
ResponderBorrarGracias Francisco. Valoro en mucho tu compañía y tus palabras. Desafortunadamente los tiempos de sequía se prolongan cada vez más, y en medio de ese mal, que es de morir, uno sigue tratando de rescatar el instante que nos devuelve a lo esencial. Un abrazo, mery
ResponderBorrarmi querida Mery, buen día desde mis lares.. cuánta belleza del sentir de estos versos y sus metáforas... la lejanía puede separar aromas, mares, piel, natura, etc. pero nunca la esencia de los seres... decía Socrates: "la separación está en la mente"... sea muy linda tu tarde,
ResponderBorrarMERY SANANES LA LEJANÍA ES LEER TU POEMA SOBRE LA DISTANCIA QUE EL POEMA IMPLICA. COMO CADA PALABRA QUE ESCRIBES DE UNA EXQUISITA EXCELENCIA. SE MANTENGA LA CLARIDAD DE DIOS SOBRE TU MENTE PARA QUE NOS SIGAS REGALANDO FELICIDAD,.
ResponderBorrarGracias Andrés Eduardo, tus palabras me las quedo, para conservarlas como un recordatorio permanente de la claridad que requerimos para poder alcanzar a ese otro que junto a nosotros escribe. Mi abrazo
ResponderBorrarQuien se vive se pierde, Abel decía.
ResponderBorrar¡Oh distancia, distancia!, que la estrella
que nadie toca, guía.
¿Quien navegó sin ella?
Distancia para el ojo -¡oh lueñe nave-,
ausencia al corazón empedernido,
y bálsamo suave
con la miel del amor sagrado olvido.
¡Oh gran saber del cero, del maduro
fruto sabor que sólo el hombre gusta,
agua de sueño, manantial oscuro,
sombra divina de la mano augusta!
Antes me llegue, si me llega, el Día,
la luz que ve increada,
ahógame esta mala gritería,
señor, con las esencias de tu Nada.
Viví, dormí, soñé y hasta he creado
ResponderBorrar-pensó Martín, ya turbia la pupila-
un hombre que vigila
el sueño, algo mejor que lo soñado.
Mas si un igual destino
aguarda al soñador y al vigilante,
a quién trazó caminos,
y a quién siguió caminos, jadeante,
a fin, sólo es creación tu pura nada,
tu sombra de gigante,
el divino cegar de tu mirada
Apreciada Mery Sananes poeta comunicadora al universo histórico de bellas poesías.
ResponderBorrarlejana estás y sin embargo muy próxima.
ResponderBorrarAsí es, y si no es, uno la inventa! Abrazos querida Isabel.
ResponderBorrarMery Sananes La lejanía de los seres queridos, duele...y de los lugares adonde fuiste feliz, también ...pero también la del amor que núnca conociste!...
ResponderBorrarY aún, siendo tan cruel, inspira a los poetas, como tú, a escribir estas maravillas!....
Felicidades, querida Mery.🌹💝
Mi querida Manoli gracias por tu estar y ese dejarme siempre palabras de afecto y de cariño. Y yo las recobo con mucha alegría.Te abrazo.
ResponderBorrarPrecioso!!
ResponderBorrarQue bello poema Mery Querida!
ResponderBorrarUno siempre vuelve a esos lugares y seres donde amo la vida.
Mi Abrazo inmenso!
hermoso saludo
ResponderBorrarAbrigas el alma
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