12 de febrero
Un día la hija trae entre
sus manos una rosa solitaria
y me la entrega
llegaba erguida de alto talle
y una hermosa y tierna
fragilidad
12 de febrero
Tanto ese día como los otros
su presencia me produjo una mágica
atracción que no lograba traducir
12 de febrero
Sólo la miraba una y otra vez
intentando descifrar sus recados
su alfabeto de pétalos
su dúlcimo lenguaje de
temblor de crisálida
12 de febrero
Como si tuviera en su interior
un mensaje que debía entregarle
a mi inusitado arrobamiento
12 de febrero
Sólo giraba en torno a ella
en cada ángulo de sus respiraciones
empeñada en develar
su enigma
13 de febrero
Día tras día iba en su busqueda
para encontrar nuevas conjugaciones
en el movimiento de su
danza
14 de febrero
Se abría y se cerraba
como si oficiara un sagrado
ritual en el interior de su
corazón de fuego encendido
16 de febrero
Y se extendía como un amanecer
sobre las mañanas invocando un vals
aún en construcción
19 de febrero
Desenvolvía el vuelo de sus alas
como si se fuesen juntar a las
mías enardecidas de su ajuar
de rubores
20 de febrero
Sin doblar su talle seguía
una ruta de encantamientos
que soltaba como esporas en los
mediodias de mi invierno
22 de febrero
Hasta que hoy al acercarme
como siempre a escuchar su voz de
enjambre y mordedura
divisé sobre su savia una
palabra no pronunciada
convertida en el gerundio
de un brote nacido de su cántico
solar
El primero ya soltando los atriles
de su sueño en la curvatura
de su alianza y el sismo
de su nacimiento
El segundo anunciaba su arribo
desde los pliegues del agua
asomando su anhelo de ser
rosa de eternidad
Qué decir entonces que contenga
la belleza de esta eterna resurrección
una rosa contenida en la cerca de
un cristal se hace vida de nuevo
en los hijos que nunca dejará
de parir
Y la rosa madre se torna
en un allegro en sol mayor
un adagio de estrellas contenidas
en el tallo de una cosecha
de hierbas y un andante final
cabalgando su risa sobre el
tropel de los milagros
texto y fotos
mery sananes
22 febrero 2021
Un poema simplemente hermoso
ResponderBorrarAh! Qué acercamiento a la rosa, en ella se nos revela el ser, lo tocamos, diría, Mery.
ResponderBorrarGracias mis queridos César y Argelia, tan conocedores y amantes de las rosas son, que siempre las siento sembradas en vuestras palabras y corazones. Mi abrazos reiterados y crecientes.
ResponderBorrarHermoso poema. . . 🌷🌷🌷
ResponderBorrarUn afecto de esos que extrañas y amas se puso en el camino de tu hija que cuando vio la rosa sintió que te la tenía que regalar; y una vez en tu mirada sentiste la voz de la rosa que te decía te amaba. Me encanto el poema muy sutil y muy profundo para ser olvidado!!
ResponderBorrarBelleza de poema cómo quien lo inspira...la Rosa!!
ResponderBorrarMuy bello !!
ResponderBorrarQué bellos acercamientos y cambios caprichosos dignos de la misma hermosura en persona. Le hablas con tu mirada y la respuesta es una promesa de futuro. No te pierdas la eternidad con la que te obsequia.
ResponderBorrarBellísimo poema poeta, la sutileza de la palabra para aliviantar la dureza de la fuerza desmedida y dar placer el alma quebrantada
ResponderBorrarUn nuevo estilo alumbra nuestra poeta en estos momentos tras un largo período de sequía.... manteniendo el 'pathos' hasta el último instante infinito.
ResponderBorrarMuchas Gracias poeta sensible y noble!! Hermoso Poema.
ResponderBorrarEn estos tiempos oscuros,alguien dedica un poema y se detiene embriagada en en la belleza de la rosa.
Nunca dos Almas se encuentran por casualidad.
Que música tiene nuestra sintonía.
Uno nunca sabe cuando toca un Alma,pero que lindo es hacerlo.
Hoy has tocado la mía.
Te dejo mi Abrazo conmovido y agradecido.
Creo, querida Silvia, que es un proceso mutuo. Tú me has hablado con el lenguaje de las rosas y desde ellas mismas. Un gesto muy hermoso que me has enviado y que siempre me ha conmovido. Y hemos encontrado ese territorio común que sin duda nos acerca. Y es para celebrarlo. Gracias por crearlo.
ResponderBorrarUn nuevo estilo alumbra nuestra poeta en estos momentos tras un largo período de sequía.... manteniendo el 'pathos' hasta el último instante infinito.
ResponderBorrarSe aprende siempre mucho en estos territorios. En medio de las más feroces sombras, cada quien enciende una fogata. Algún día juntas habrán de reconstruir el fuego prometeico. Y las tierras áridas se llenarán de rosas, como tantas veces lo has dejado inscrito en tus versos, Miguel.
ResponderBorrarQué belleza de diálogo entre dos personas a través de las bellas Rosas!!
ResponderBorrarLeerlas es ver representadas x palabras la expresión de la Naturaleza qué nos da una flor!
Como no forjarlo y nutrirlo en medio de una realidad en la que hasta el silencio ha sido intervenido por el grito y la violencia. La rosa, la florecita sin nombre de Luis Mariano, se convierten en nuestros verdaderos interlocutores. Son quienes nos entregan en su herbívoro alfabeto la clave de quienes en realidad somos. Si nos detenemos a aprenderlo y absorverlo. Gracias Susana por tu hermoso comentario Susana.
ResponderBorrarMery Sananes gracias infinitas x acercarme a éste nuevo Lenguaje 💓🥀💓 abrazo 🥀
ResponderBorrarDelicado y bello! Un poema que transmite a la vez fuerza y ternura, mi querida Mery Sananes🌹🌿🌿🌿❤
ResponderBorrarEn cada poema nos regalas una rosa 🌹 que nos da vida , ternura , amistad etc y un gran ramillete de ellas que representa la vida de nuestros hijos
ResponderBorrarLa poeta, Mery Sananes, nos ha dejado todo un poema de las latitudes en su obra, "El tropel de los milagros" Es un poema impactante con un sortilegio de metáforas en donde las silabas y las palabras se vuelven chorros de abejas de oro
ResponderBorrarcortejando a la rosa, su vestido de seda y pétalos, su reino del perfume cuyos pasos invisibles cimbran en las galaxias incluyendo nuestro humilde vecindario: Nuestro sistema solar…ubicado al doblar la esquina en un tramo del Camino de la leche…
Vale la pena rumiar y re-leer este poema, "El tropel de los milagros" especialmente en estos tiempos de incertidumbres y de falacias.
Hay poemas, pocos, pero los hay, en donde las palabras y los versos desaparecen y, en un santiamén se vuelven un divino estremecimiento de agónicas dulzuras; "El tropel de los milagros" de Mery Sananes es uno de ellos. Y al re-leerlo no hemos perdido el tiempo, al contrario, nos hemos enriquecido habitando el espacio espacio de lo verdaderamente bello....
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©Lionelyinosanchez