En inviernoel cielo es un incendiode plenitudes mientrasemerge desde el albahasta alcanzar los atardeceres
Se asoma primero
fuera de la posada de
su horizonte
Y se recuesta sobre las ramas
deshabitadas de los árboles
Buscando un hospedaje
donde guarecer su soledad
Y luego se despliega
porque sabe que antes de
que llegue la noche
tendrá oportunidad
de soltar los pinceles de
van gogh mientras aguarda
sembrarse en los gajitos
de naranjales y el arrebol
solar de un tiempo
que no le pertenece
Y la luz se derrama
como una lámpara
de vocinglerías
intentado alcanzar
el asombro del
hombre solitario
Tanto nos ha dejado
este amanecer y atardecer
en un solo viaje del mirar
texto / mery sananes
fotos / anala y ms
Antonio Vivaldi
El Invierno
de Las Cuatro Estaciones
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