Cuando mengua la luna
la noche le pertenece a los luceros
saben que ella aparecerá
saben que ella aparecerá
en la madrugada a pasear
su bajel sin velas
antes de que el sol opaque
su espejo
y despliegan sus alas
hasta tomar su lugar
en el mapa de las constelaciones
Allí el hombre que mira
se asoma sorprendido al cielo
y aunque no encuentra la luna
se enamora de cada una
de las luces que suspendidas
en un suspiro trazan
la elipsis milagrosa
de un vivir
La noche se vuelve entonces
un oceáno de estrellas
un tropel de fugas
una eclosión de candiles
que invitan a danzar en
el algoritmo de un beso
mientras el sol aguarda
su ascenso
para refundar su huerto
de girasoles y pomarrosas
texto y foto
mery sananes
20 febrero 2017
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5 comentarios:
En los cursos o talleres de poesía deberían llevar poemas como éste para enseñarle a los aspirantes a poetas un ejemplo de un bello poema
UN abrazo
Me encantó... llena mi vista, mi alma que se delata en mi sonrisa
mil gracias, que bello que nos alumbren los luceros hasta que amanezca!
Precioso
Hermosiiimo un bendecido y bello dia
Hermosiiimo un bendecido y bello dia
Que bella poesía, permite asomarse a un amanecer tranquilo en mi Venezuela tan agitada!
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