Mira mi pichonerita
hoy sé que la vida se te ha
puesto grande y del tamaño
de los colibríes en su dimensión
de los amaneceres y sé por
tus sueños de carbonera
que estás dispuesta a navegar
en la proa de las esperanzas
que se asoman a los nidos de
las mañanas que fabrican
caramelitos de siempre amor
y confites de cariñitas para
tus alumbritos de ternura
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