para juanjo
y la búsqueda de la simplicidad
Amanecemos de lluvia o de sol
en este otoño que deslumbra
intentado ser árbol que se
deshoja o flor que batalla
para ingresar a la tierra
y cobijarse en la nieve
hasta asegurar su retorno
primaveral
Y no sabemos de qué
transparencia asirnos
para que este vivir humano
tenga un sentido distinto
al de acomodarse a las
reglas de los otros
a las perfectas instrucciones
que nos regulan
Y regresamos al tiempo
que siempre termina siendo
ajeno mientras el nuestro
se convierte en una
debacle de teclas inconclusas
jugando a ser señal mensaje
o grito sin destemplanza
para no despertar los
insomnios
El canto de los pájaros
se ha silenciado y es como
extraviar las coordenadas
propias y sin embargo
el concierto de los grillos
no detiene sus señales
armónicas como si fuesen
los eternos intérpretes
de las lágrimas que no cesan
de derramarse
El amanecer pierde
su tonalidad y se viste
de esos grises con los que
nos cobijamos aguardando
un rayo solar fulminante
que se ha fugado a los
ojos de un universo distante
Y uno queda aquí
escribiendo un no sé qué
sin sentido mientras
escogemos cuál dilema
hoy encontraremos de
nuevo sin respuesta ni
salida abrumadas las
horas que cumplen su
función de guardianes
de cercas y muros inútiles
El resultado un poema
sin derroche de miel
ni susurros de pájaros
una palabra cercada
que se quiebra antes
de nacer
Una nueva deuda
destartalando silencios
más hondos que toda
inútil invención
texto y fotos
mery sananes
22 octubre 22
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1 comentario:
Pareciese un vuelo metafísico, solo que al final cae a tierra; aunque sin espera del reencuentro de una humanidad aprisionada, y lo peor en sus autocoartadas
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