CANCIÓN DE MAÑANITAS

CANCIÓN DE MAÑANITAS
para guagó

Hoy  es necesario preguntar por el mundo

vida o canción  que nos ha tocado andar 

en medio de puertas que no saben ni sienten  

los clamores que se pliegan a los llamados de

quienes piensan en un tiempo para la ubicación de lo humano en su estricta condición

Y todos sabemos  que esos días han salido por los ventanales de los olvidos y que no regresarán a las señales consagradas por los atuendos de los caracoles que se vuelven risas en las inmediaciones de la existencia capaz de presentarse como un arcón de mañanitas

Entonces el festejo se aleja del foco de acompañantes y andamios llamados a ser imaginerías de navegantes que miran  hasta  por los recados de los mares que se fortalecen con  el paso de unos despertares que no hemos sido capaces de convertir en aliados de nuestras inocencias

Estamos obligados así a conformarnos como pregoneros de risas y aromas encuentros y soles músicas y sueños azafates y granjerías de amor para que en los pasos dejemos huellas y miradas que toquen los cielos en los

que habita por siempre la suprema decisión que alcanza la poca humanidad que aún no tenemos

¿Cómo acercarnos entonces a una canción de ausencia que nos llama en medio de todos los compases de la destrucción que interviene en una plenitud sedienta de respiración?

¿Seguiremos tras la línea de los asaltos que nublan el fragor de los caminos  para  hacer de la vida una simple instancia de tiempo pasajero?

¿Aceptamos acaso el decir que nos vuelve focos de andantes para quienes está agotado el mensaje sinfónico de los amaneceres?

Por eso hoy estamos obligados a celebrar el trinar de quienes son capaces de subir el tono de su canción y hacer de su entrega un ritual para la siembra del porvenir que será creado por los auténticos militantes de la vida

Porque en esos amantes de la existencia sólo puede tener espacio en esta hora el himno de la alegría de Ludwig van Beethoven y la consagración de todas las primaveras que impone Igor Stravinsky

texto / agustín blanco muñoz

foto / mery sananes
06 de noviembre del 2015