Cómo nombrar
a quien tiene tantos
nombres
Cómo agasajar
a quien agasaja cada día
el vivir de todos aquellos
que la rodean
Cómo reparar cuando
ella es la reparadora
de todo dolor toda herida
todo tropiezo del
otro con quien siempre
va
Cómo construirle alegrías
si ella es la que a todos
alegra ya sea con un
abrazo una vianda
un dulzor de mango y
guayaba que se queda
cosido al paladar
Cómo consentirla si ella
es puro consentimiento
no solicitado que ella
adivina con ese mirar
cósmico que aprendió
de Salvador su padre
y de ese derroche sin fin
que Julia su madre
dejaba sobre el fogón
mientras sus diminutas
manos recogía el
dulzor de los anones
morados y las semillas
de peonia que repartía
a todos acompañado
de sus bendiciones
Cómo reinventar un mundo
en el que ella sea puro
amanecer noche de claridades
mediodías irisados de
pájaros aguardando
cobijarse en el hospedaje
de la luna
Cómo dejarle un
abrazo enraizado en su
corazón talismán de alegría
refugio de esas lágrimas
que ella jamás derrama
sino que recoge en un
cántaro antiguo hecho
de barro enamorado
Cómo celebrar el
prodigio de sus años
derramado sobre los
otros como esas enredaderas
de jazmines que llenan
las tapias y los muros
para aligerar el peso
de las cercas
Cómo hacer de una
fecha una fiesta sin fin
un recodo donde almacenar
sonrisas el vuelo circular
de un ave que regresa
siempre a su nido
para regalarle al mundo
un nuevo trinar
Cómo inventarle a su ansias
un equipaje de astromelias
un herbolario de hojas
de cayenas una estación para
un tren que la lleve cada vez
que lo quiera al territorio
de los sueños y a las altas
montañas donde moran
los milagros
Todo eso procuro inventar
para devolverle en diminuto
toda la cosecha de alegrías
consuelos y viandas florales
que ella siempre hace circular
por este mundo tan ajeno
a su bondad y su sentir
Podremos entonces hacer
algo con el sentido mágico
que ella le otorga a todo lo
que hace y deshace compone
y vuelve a componer
Aprender de su
inacabable ternura
de la risa contagiosa que
derrama por donde pasa
de la transparencia
de su alma que deja
huellas donde se posa
Tal vez entonces
algún día el mundo
cambie de dirección
y se habite de danielitas
y de ese jardín de maravillas
que ella riega y hace
crecer cada día
Y todos esos deseos
los reunimos en ese abrazo
que es nuestro único
equipaje para que nunca
deje de sentir
que quererla es lo mejor
que tenemos para obsequiarle
en este y todos los días
en los que celebramos su
vida y existencia
sin los cuales quedaríamos
desprovistos hasta
de nuestros más antiguos
suspiros
¡¡Y qué suene la música
de Billo's Caracas Boys
y se haga la fiesta!!
texto
mery sananes
fotos
danielita barrolleta
26/10/22
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