Agustín Blanco Muñoz
Mucho se ha dicho que Venezuela es un país de amigos. Una de esas verdades establecidas que nadie niega. Porque ¿Quién aquí no tiene su ´legión de amistades´? Y a la hora de la partida de un amigo y del dolor contraído, cómo no sentir que se nos va un hermano de la vida.
En nuestro caso estamos hoy en el escenario con quien se nos ubicó en el alma: Manlio Sardi Muñoz (1930-2024). Un merideño egresado de la ULA como odontólogo y que se viene a hacer carrera profesional en la UCV, donde nos conocimos hace poco más de seis décadas. Y desde entonces nos hicimos amigos cada vez más cercanos.
UN PENSAMIENTO MAYOR
Su formación trasciende su profesión inicial, toca diversas áreas del saber en general y de la educación en particular. Un campo que aborda con su marcada sensibilidad y que aplica en su labor docente como guía para llevar al educando más allá del conocimiento establecido y ubicarlo en el plano crítico que es el tránsito hacia el pensamiento creador, arma mayor para construir un mejor vivir.
MAESTRO Y AMIGO EN EL QUE PREVALECE LA VIDA AL SERVICIO DEL OTRO
Nos colocamos entonces ante el pensador que no pierde oportunidad para expandir su saber sin limitación ni egoísmo alguno. Porque en Manlio prevalece la humildad, la sencillez, la honestidad. Vida al servicio del otro. Es el maestro y amigo de todos que pone por encima de formalidades, el desprendimiento y el aporte para quien lo necesite.
Estamos así ante valores no comunes, dado que esto de ofrecer un servicio, una mano, sin que medie como requisito indispensable la consabida tarifa-remuneración, no es nada frecuente en esta sociedad de ´lo mío y lo tuyo´. Esta es la posición de una antigua escuela de la que forma parte también otros amigos, hermanos menores de Manlio: Aníbal Sánchez Padrino, ya en su compañía, y Elbano Pieruzzi. Es gente que se aparta del lineamiento que privilegia la ganancia para ejercer la orientación espiritual y material del otro vivir, caracterizado por el apego y la solidaridad con quien la requiere.
¿ES QUE LA VERDADERA AMISTAD PERTENECE AL PASADO?
Y todo este andar se inspira y orienta en lo que ha sido uno de los valores supremos de los venezolanos que muchas veces vemos hoy disminuidos. ¿Es que la verdadera amistad pertenece en buena parte al pasado? ¿Ya no hay entre nosotros quien se reste por otro con la misma fuerza que lo haría por él?
En este sentido, el legado de nuestro muy querido y respetado maestro Manlio, nos lleva hoy, en esta disminuida Venezuela, a una obligada reflexión sobre una práctica que ha sido históricamente, uno de los puntales de nuestras relaciones en la vida del andar solidario, el compartir y el respetarse en medio del afecto y el quererse. Y todo con la idea de llamar la atención sobre la necesidad de levantar y mantener en alto el valor y la realidad-institución de la amistad.
SIN AMISTAD Y VIDAS COMPARTIDAS PUEDE LLEGAR LA SOLEDAD
Sancho, ¡Nunca debes olvidar que sin amistad y vidas compartidas en el querer y la entrega, puede llegar la soledad y la depresión que son grandes enemigos del pleno vivir!
PD: La versión inicial de este material se publicó en ¨Últimas Noticias¨, Caracas, 14/09/24, p.17.
@ABlancoMunoz / ABM333@gmail.com
3 comentarios:
Esto no tiene pérdida ni desperdicio. Gracias por compartir. Los amigos son un asidero para
sortear estos tiempos tan difíciles.
Gran camarada y amigo... de los de antes
Gracias Profesor. Su Alumna, ¨mi compañera¨, recordaría las gratas experiencias en la integridad del Profesor Sardi en su Facultad y por mi parte, compartimos la referencia al ¨valor¨ constante de la amistad para ustedes, como una lúcida participación en algunas sesiones en el Doctorado. Saludos Cordiales.
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