domingo, julio 30, 2023

UN PAÑUELO COSIDO CON HILOS DE BRISA



a ella
a la abuela y su pañuelo
que sigue girando sin cesar

 
Los julios pertenecen por
entero a la circunvalación
de aquel diminuto pañuelo
que tú estrujabas entre tus
dedos para pasearlo desde
la orilla de tu tristeza hasta la
curvatura de aquel telar
con el  que recorriste la vida
como si de los días brotaran
huertos de bromelias
y almendrones

Con él sedimentaste la tierra
que le dio cobijo a tus angustias
y con la levedad de sus costuras
levantaste un océano de suspiros
que resguardara en las noches
los hijos que ibas pariendo

De sus pliegues diminutos
hiciste un fogón donde la lumbre
eran tus ojos y un recinto para que
el maíz floreciera sobre los azafates
como un pan aliñado de lágrimas


De tanto agitarlo como si estuviese
cosido de brisa se hizo porche y
mecedora para que guindaras tus
sueños en los atardeceres y
al empaparse de las lluvias de
mayo se abrió como un solar
que salpicaste de flores para que
alumbraran tus madrugadas

De su corazón alpistero
salían en vuelo las caricias
que le dibujabas a  la risa de
los hijitivos que se recostaban
en tu regazo en busca de tus
manos olorosas a panela y
húmedecidas del brote de las
guayabas que habían ascendido
antes que las tejas para que nunca 
dejara de colarse el cielo por el 
ventanal de tus pupilas vestidas 
de un gris que resplandecía más 
que el rayo fugaz de un cocuyo

De ese pañuelo bebimos todos
la confitería de tus abrazos
y las bendiciones que nos repartías
como un rito de amor que se quedó
grabado en la corteza del tiempo

De sus puntadas vimos escurrirse
toda la ternura  de la vida que tú
extraías a retazos para que alcanzara
por igual la envergadura de nuestra sed
y hoy la llevamos enhebrada en la
espiral de las células en la mordedura 
del beso en la encrispada soledad 
de esta historia como un
río de pájaros que cada día
holla la piel con la sonoridad de su
canto dúlcimo e inextinguible



mery sananes
29 de julio del 2012

10 comentarios:

Enrique Rojas dijo...

Hermoso texto! Nos hizo sentir nietos de esa abuela.

Valle Pelaez dijo...

Muchas GRACIAS

Pepi Bobis Reinoso dijo...

Intensidad y emoción.

Jesús Cedeño dijo...

Abuela en este julio 2021…“diminuto pañuelo que tú estrujabas entre tus dedos”, pero inmenso del tamaño de tú corazón…regazo de madre, único cobijo capaz de salvarnos de este mundo, que bien pudiéramos llamar el segundo diluvio universal…entonces, Arca con alto velamen hendiendo en los azules de las pupilas de tus hijos…madre siempre!, te amo... Saluts!, jaced.

Freddy Aguirre dijo...

Bellísimo poema, encantador y de un amor profundo, amores que se llevan en el alma

Ulina Fadul dijo...

Dulce, entrañable y hermosísimo poema, Mery! Te abrazo, quiero y bendigo desde mi corazón.

Myriam Iturra Ampuero dijo...

Hermosos recuerdos encierra ese pañuelo.

Miriam Maura Mallorquin dijo...

Gracias mi querida poeta, me hicite recordar un escrito reciente: vibrando en el telar...muestras imágenes que se dibujan en nuestra mente y que dejan un sabor especial en nuestra boca, sinestesia maravillosa tienen tus líneas, tu verbo parece de ensueño...me llena de fragancias y suavidad.

Administrador dijo...

Ciertamente Miriam hay vivencias que nos marcan, nos dejan huellas, se cuelan entre las palabras y se redactan ellas mismas. Y siempre quedan pequeñas ante la estatura de lo mágicamente sencillo y esencial. Gracias por tu compañía y ese sentir compartido.

Silvia Japkin dijo...

Bellísimo y sensible, como siempre tus escritos. Gracias por estar!